20:00h

cinefórum

PERFECT SENSE (2011)

 “Me gustaría que todos los que acudís a un cinefórum, llegaráis con la película virgen, a punto de desvelar”. Esa regla de oro es la que trato de cumplir cuando me niego, una y otra vez, a contar el argumento y tan sólo menciono unas pinceladas, unos pocos detalles. Así que… Puedes seguir leyendo.

Si hay algo perturbador en este relato que os propongo, es la existencia de una narradora, cuya dulce voz suena desde un lugar y tiempo indefinidos. Esa voz nombra suavemente, y con gran curiosidad, los gestos y ritmos diarios que identifican al ser humano. Todos sabemos que los animales y plantas no van a trabajar, que no son admitidos en los restaurantes, que no hacen el amor en una cama… Y, sin embargo, debo adelantar que el tema esencial de “Perfect sense” se oculta detrás de esta extraña afirmación, de la obviedad de esta revelación aplastantemente sencilla.

Personalmente, arrastrado por la potencia y el enorme encanto de sus imágenes, me asaltó sin saber cómo una vieja ensoñación que ya no recordaba. Un equipo de TV llegaba, micro en mano, con los focos encendidos, a las puertas de Stromboli. No era mi primera entrevista, pero ésta me sorprendió por una de esas preguntas que, por su enorme simplicidad, ningún profesional te plantea: “¿Qué vendes?” Y yo, gratamente sorprendido, respondo: “Al principio, cuando inauguramos la tienda, estaba convencido de que vendería imágenes. Pero no fue así. Nunca. Los clientes muy pronto me enseñaron que sólo había una cosa que querían encontrar y comprar en Stromboli: emociones. Risas, llanto, acción, miedo, pensamiento, erotismo, amor…” Supongo que recordé esto por algo genuino, un rastro estremecedor que deja el desenlace de “Perfect sense”. Mientras la mayoría de películas finalizan con la última bobina, expiran con el último brote de imagen, este film sostiene detrás de ella una enorme y perturbadora emoción.

¿Te atreves a descubrirla? ¿Y compartirla?

Este jueves, cuando está a punto de estallar en el barrio RussafArt, nos adelantamos y proponemos una sesión especial de cine. Espero que resulte todo muy tentador. Dejo una perla musical que sella este film, una evocación maravillosa de lo que deparan sus imágenes. Nos vemos en Electropura.

Un abrazo,

Dani Gascó